Si quieres bajar de talla, ponte el despertador, porque debes practicar ejercicio antes de desayunar.
Para sacar el máximo rendimiento al deporte, decir adiós a los kilos de más y, de paso, reducir el riesgo de sufrir diabetes, debes entrenarte antes de desayunar.
Eso afi rma un estudio realizado en Bélgica, en el que se sometió a 28 voluntarios a una dieta con un 50% más de grasas y un 30% más de calorías que su ingesta habitual.
Un grupo decidió no practicar ejercicio, mientras que otros dos hacían deporte cuatro días a la semana, una hora cada día. Tras seis semanas, el grupo que no practicó ejercicio ganó más de tres kilos de media. El que se entrenaba después del desayuno tambien ganó peso, pero aquellos que se entrenaban antes de la primera comida del día apenas ganaron peso y no desarrollaron resistencia a la insulina como los grupos anteriores.
Eso afi rma un estudio realizado en Bélgica, en el que se sometió a 28 voluntarios a una dieta con un 50% más de grasas y un 30% más de calorías que su ingesta habitual.
Un grupo decidió no practicar ejercicio, mientras que otros dos hacían deporte cuatro días a la semana, una hora cada día. Tras seis semanas, el grupo que no practicó ejercicio ganó más de tres kilos de media. El que se entrenaba después del desayuno tambien ganó peso, pero aquellos que se entrenaban antes de la primera comida del día apenas ganaron peso y no desarrollaron resistencia a la insulina como los grupos anteriores.
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